CONTEXTO HISTÓRICO:
La obra de Karl Marx (1818-1883)
se desarrolla en el contexto del siglo XIX, el cual es el siglo de la
Revolución Industrial y del triunfo definitivo de las revoluciones burguesas,
(revolución francesa 1789).
Esta época estará marcada por el
capitalismo, el estado burgués, y (especialmente en Alemania e Italia), el
nacionalismo unificador. El capitalismo y el proceso de industrialización,
supone el surgimiento de una nueva clase social, la cual es el proletariado, y
de nuevos movimientos políticos y filosóficos relacionados con él, como el
marxismo (originado por él), el anarquismo de Bakunin y diversos socialismos que
formarían la Primera Internacional.
Marx considera que el avance de
las fuerzas productivas de la revolución industrial es el motor de cambio de
las relaciones de producción cuando estas están en contradicción con aquellas.
Marx criticará las condiciones
sociales de miseria, de explotación (cuando hay plusvalía y de gran diferencia),
de enajenación o de alienación (ya sea política, religiosa, social, económica,
etc…) en las que vive el proletariado, considerando que la lucha de clases
contra la burguesía deberá conducir a la apropiación de los medios de
producción, una revolución violenta que termine con las condiciones de
explotación de los trabajadores. Marx considera que la revolución violenta
conducirá a la dictadura del proletariado. Si bien estos ideales de libertad,
igualdad, y fraternidad son inspirados de la Ilustración (época de Kant y de
las revoluciones más importantes) y los que impulsaron los movimientos
revolucionarios, en los que desempeña un papel destacado el propio Marx.
CONTEXTO CULTURAL:
El siglo XIX es el siglo del romanticismo, que significó la
ruptura con la adoración de la razón y la búsqueda de la universalidad propia
de la Ilustración en favor de la irracionalidad del sentimiento y del
individualismo. El gusto por la exageración, por lo apasionado, por lo exótico
define principalmente el arte en esta época. La pintura historicista burguesa
dejara paso a las nuevas formas pictóricas que se inician con el impresionista.
También destaca el realismo y el naturalismo literario. El liberalismo y nacionalismo
se nutrieron de la exaltación de la libertad encarnada por el romanticismo, que
alcanza sus expresiones más acabadas en literatura (Goethe), pintura
(Delacroix) y música (Chopin, Schuman). El realismo (Stendhal o Dickens, en
literatura, y Courbert o Millet, en pintura) y su posterior evolución, el
naturalismo (Émile Zola) reflejaron la situación de penuria que acompañaba a
una gran parte de la sociedad.
CONTEXTO FILOSÓFICO:
Es imprescindible nombrar a las
llamadas "Tres fuentes del marxismo": la economía política inglesa,
el socialismo utópico y el idealismo alemán.
Marx, que influido en sus obras, refleja: con Epicuro, al que dedica su
tesis doctoral, defensor de un materialismo de la libertad, metaforizado por la
doctrina del cliname; Rousseau del que toma su concepción de democracia
igualitaria o la idea de asociación fundada sobre la participación directa de
los ciudadanos en la decisión general; Adam Smith del que procede el fundamento
de la propiedad del trabajo; y por último Hegel, el más inspirador y el
adversario del trabajo teórico de Marx sobre la "contradicción
dialéctica" y la historicidad de la sociedad humana.
La economía política de Adam
Smith y David Ricardo rechazando las ideas fisiócratas, consideran que el
trabajo era la fuente de propiedad, sin embargo no consideran que también el
trabajo asalariado en el capitalismo es una fuente de alienación y desigualdad
social, porque los medios de producción social están en las relaciones sociales
de explotación por el origen de la propiedad privada de los medios de
producción. Los socialistas utópicos buscaban reformar la sociedad apelando a
los buenos sentimientos, haciendo una crítica moral a la alta sociedad, pero
según Marx les falta la crítica científica que aporta el materialismo
histórico, para darse cuenta de que la lucha de clases deben conducir a la
abolición de la propiedad privada de los medios de producción, a la eliminación
del estado burgués y de las clases sociales.
El idealismo alemán de Hegel
proponía un sistema filosófico y un método, la dialéctica. Marx, a considera
que la realidad tenía un carácter material, que la historia era el desarrollo
de los sistemas materiales de producción, de los modos de producción, que lo
ideal es el reflejo de las condiciones materiales en que los hombres viven, aunque
le daba la razón a Hegel cuando este afirmaba que la realidad tenía un carácter
dialéctico que debía resolverse en una síntesis. Marx hereda la crítica del
idealismo absoluto de Hegel por ser una teología racionalizada y por su
afirmación materialista, pero no estaba de acuerdo con el por qué concebía al
hombre como pasivo, no como ser activo que crea su propia naturaleza por medio
del trabajo frente a la naturaleza y que debe transformar la sociedad para
desalinearse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.